Transparencia Latam

Transición normativa: ¿Oportunidad o riesgo?

En los recientes debates sobre Derechos Humanos y Empresa en el Palacio de Naciones Unidas en Ginebra, se vislumbra un cambio significativo y por lo que atravesamos una transición normativa. Tras años de los Principios Rectores sobre empresas y derechos humanos, de carácter voluntario, nos dirigimos hacia una nueva fase de mayor normatividad.

Due dilligence: ¿Riesgo o Oportunidad?

En este cambio, algunos expresan preocupación sobre posibles costos y riesgos asociados al incumplimiento de nuevas regulaciones. Un ejemplo clave es la directiva europea sobre diligencia debida en sostenibilidad, próxima a su aprobación. A pesar de las inquietudes, es esencial comprender que la no observancia de los derechos humanos conlleva costos y riesgos mayores, incluyendo sanciones y daños a la reputación corporativa.

Impacto Global: Directiva Europea y Empresas en Terceros Países

La directiva europea, con su alcance extraterritorial, afectará a empresas europeas operando fuera de la UE y a las no europeas con presencia en Europa. Si bien puede generar reticencia en algunos sectores, la realidad muestra que las empresas comprometidas con modelos de negocio sostenibles son más rentables y enfrentan menos riesgos a largo plazo.

Razones para la Adaptación: Beneficios de Estrategias Sostenibles

Investigaciones respaldan que las empresas comprometidas con sostenibilidad son más rentables y menos riesgosas. Adaptarse a nuevas estrategias, alineadas con los entornos locales, fortalece el desarrollo empresarial y promueve la armonía con los territorios de operación.

El cambio normativo exige ajustes en las formas de hacer, pero solo las estrategias coordinadas con actores locales perdurarán. Obtener la «licencia social para operar» implica un desempeño empresarial libre de riesgos ambientales y sociales, preservando los derechos humanos.

Conclusión: El Camino va hacia un Futuro Empresarial Sostenible

A pesar de los desafíos, la nueva normativa fortalecerá enfoques empresariales sostenibles y de valor compartido.

Está ampliamente demostrado por numerosas investigaciones que aquellas empresas que apuestan por modelos de negocio sostenibles y que, por tanto, se preocupan por los impactos ambientales y sociales de su actividad, son más rentables y asumen menos riesgos, fortaleciendo su desarrollo empresarial.

En resumen, la transición hacia la sostenibilidad y el respeto de los derechos humanos no solo es una obligación normativa, sino también una oportunidad para construir un futuro empresarial más fuerte y ético.